
*Si se tratara de simular democracia, ya hubiéramos llegado a acuerdo con ellos; si es tan malo el PRI, porque se alío el PAN con ellos?
Si yo tuviese que dar un consejo a los del PRI, pensando en voz alta, les diría: reivindiquen su historia de lucha en favor del pueblo dijo el presidente Andrés Manuel López Obrador y citó un ejemplo:
Se propone la reforma energética para votar en favor de la CFE, creada por el general Cárdenas, el que nacionaliza la industria eléctrica es el presidente Adolfo López Mateos, y la reforma constitucional era para fortalecer una empresa pública. Y estos señores, porque se olvidaron de la historia o no conocen la historia, votan por seguir apoyando a las empresas extranjeras y por seguir socavando, destruyendo a la empresa pública, afortunadamente, lo resolvimos, pero ¡cómo van a actuar así!
En el caso del PAN, cuando propusimos que se elevara a rango constitucional lo de la pensión a los adultos mayores votaron en contra. Pues los considero más sinceros porque pues eso es lo que han sostenido durante mucho tiempo, es un pensamiento muy conservador.
Y tras las elecciones del 5 de junio, comentó: ojalá y no se afecten los partidos, que se consoliden, necesitamos de las organizaciones políticas, se requiere de oposiciones fuertes, no paleras. Si se tratara como antes, de simular que hay democracia, ya hubiésemos llegado a acuerdos con ellos, con todos ellos. Ahora dicen que el movimiento nuestro es el nuevo PRI. Bueno, y si es tan malo lo del PRI, ¿por qué se aliaron al PRI los del PAN?
Tienen un problema ahí, tienen que hacer una reflexión de fondo, análisis de fondo, no caer en la autocomplacencia, el autoengaño: por ejemplo, esto de ayer, ¿no? celebrando, ‘de seis, ganamos dos, pero ellos decían que nos iban a ganar las seis, o sea, nos fue bien. De veras, o sea…
Comentó: Leí a otro más inteligente o más famoso diciendo: ‘Sí, se perdieron no sé cuántas gubernaturas, pero no fue aniquilante’. No, pues nosotros queremos triunfar, o pienso que en la democracia, primero, no vernos como enemigos, sino como adversarios, y como adversarios a vencer, no como enemigos a destruir.
Eso lo que te puedo comentar, tenemos que seguir adelante. Uno de sus problemas es que se arraigó mucho la idea de que el pueblo es tonto, de que se le puede manipular. Yo siempre digo que tonto es el que piensa que el pueblo es tonto. Indicó: No le tienen respeto ni amor al pueblo, se sienten superiores, entonces hay mucha gente, pero son millones, que piensan que si se están dando los cambios en México es por la ignorancia de la gente cuando, si a esas vamos, yo podría demostrar de que el pueblo es muy inteligente, tiene un instinto certero. No nuestro pueblo es susceptible de manipulación, no, y ese es su error de ellos.
Y como fue tanto tiempo, tanto tiempo en que la política era asunto de los políticos, de los de arriba, entonces no contaba la opinión del campesino, no contaba la opinión del obrero, no contaba la opinión de la mujer que trabaja en el hogar o que es profesional, no, no, no, eso no es la política, y ese es su error, su racismo, su clasismo, su discriminación, sus ínfulas de superioridad.
En la conferencia de prensa mañanera del 7 de junio, el presidente López Obrador dijo que no son títulos nobiliarios los que se entregan, pero durante el periodo neoliberal alentaron mucho el que los títulos académicos daban cierta superioridad. Y desde luego se obtienen conocimiento que son importantes, pero entre más conocimiento se tenga, entre más poder se tenga, más humildad hay que tener, no sentirnos superiores. Entonces, por eso, imagínense, dice Martín Moreno, de los más famosos escritores, es un prototipo de escritores leídos por estos sectores, dice dos cosas, no estoy inventando nada:
Una, ‘a los de Morena, si pudiera, los quemaría con leña verde en el Zócalo’.
Otra, ‘Morena obtiene sus votos con la gente más ignorante. Entre más analfabetismo, más apoyo a Morena’.
El mejor escritor de sectores de clase media, el más leído, no hay otro, ¿eh?, más leído que él.
Pues, sí, tienen un problema serio, tienen que buscar la forma de renovarse.



